(Foto: Esther Horchner) |
Hoy nos sumergimos en pintura.
El dip dye es una técnica de pintura aplicable a un abanico muy amplio de cosas u objetos (abanico incluido). Es como sumergir algo dentro de un cubo de pintura. De aquí su nombre.
Esta práctica está más relacionada al ámbito de la peluquería. Mirando mis álbumes viejos de fotos veo que pintarse las puntas del pelo de diferentes colores no es nada nuevo y parece ser que se ha puesto otra vez de moda.
Pero un cambio de look no tiene que ser solo personal, así que llevemos esta técnica al hogar. Utilizándola en objetos de decoración, utensilios de cocina, textil y, cómo no, en muebles.
En Studio Alis nos gusta mucho utilizarla, ya que aporta un upgrade al mueble más sencillo. La combinación de un toque de pintura moderna junto al carácter original de un mueble es perfecta. En una misma pieza viven en harmonía las huellas del pasado junto a las marcas de la actualidad. En muchos casos creando un look más sofisticado que si hubiéramos pintado el mueble entero. Un look muy fresco, muy actual y muy divertido.
Esta mesa es el ejemplo perfecto para ver como un mueble tradicional recibe un look moderno y exclusivo utilizando la técnica.
(Foto: Jeltje Janmaat) |
Aplicable en diferentes objetos. ¡Las posibilidades son infinitas!
(Fotos: Handmade Charlotte, Little Gold, A Beautiful Mess Oliver Jeffers, Want That Wedding, Creatively Christy) |
Las sillas clásicas tipo Thonet mejoran considerablemente y quedan muy chulas. Los límites los pones tú.
(Fotos: Sköna hem, Helen Cathcart) |
La técnica funciona muy bien usándola en taburetes. En este caso los de Alvar Aalto, usando la técnica arriba o abajo.
(Fotos: Design For Mankind, Trendenser) |
Combinando variedad de tonalidades similares para dar un juego modesto…
O con colores más atrevidos y divertidos.
(Fotos: Urban Outfitters, Vintage Revivals) |
(Fotos: Fab, Mel Bles) |
Ya os habíamos dicho que nos encanta el dip dye ¿verdad?
Así que, hala… ¡a marcar y a pintar!